Paige Chester era una joven de 21 años quien estaba luchando contra un severo cuadro depresivo, producto del fallecimiento de su madre en noviembre pasado.

Una investigación llevada a cabo en la localidad de Maidstone, Kent, Inglaterra, determinó que la joven se habría quitado la vida por no poder hacer frente a la pérdida de su progenitora.

Lee también: El emotivo encuentro entre madre que donó corazón de su hijo y receptor: video se viralizó

Desde octubre pasado, la joven le había comentado a su doctor que estaba un poco estresada debido al trabajo y a tener que cuidar de su madre, que se encontraba en situación de discapacidad, Mandy, consignó el medio inglés Metro.co.uk.

Tras la muerte de Mandy al mes siguiente, Paige dejó de trabajar y volvió a sus visitas periódicas al psiquiatra, para conseguir apoyo en el duelo. Luego de varias sesiones, la joven presentó síntomas ansiosos y pensamientos suicidas, por lo que se le prescribieron antidepresivos y se encontraba bajo supervisión médica del centro se salud psiquiátrica de su localidad.

En enero de este año, luego que ella y su novio rompieran, Paige tomó una sobredosis de sus medicamentos y fue internada durante tres días. Al final de ese mes, aseguró que se sentía un poco mejor y que incluso se estaba preparando para volver al trabajo, y dejó de asistir al médico.

No obstante, en marzo pasado, y luego de varios días en que la joven estaba estable, su hermana Shannon y dos amigos, fueron hasta su casa luego que ella no se presentara al trabajo y no respondiera las llamadas. Un poco antes de las dos de la tarde, Paige se había colgado en la soledad de su hogar.

Su hermana encontró una desgarradora y breve nota que decía: “Amo a mi familia demasiado y lo he intentado, pero necesito a mi mamá. Lo siento muchísimo. Los amo por siempre“.