Han pasado ya más de tres meses desde aquella noche del 13 de mayo que cambió para siempre la vida de Nabila Rifo, la mujer violentamente atacada en Coyhaique, que generó conmoción en todo el país y volvió a encender las alarmas por la preocupante realidad de la violencia contra la mujer en Chile.

Sin embargo, cuando parecían no quedar dudas acerca de la autoría del crimen e incluso la propia víctima había declarado en contra de su expareja, Mauricio Ortega, hace un mes ante el fiscal Pedro Salgado, ahora un audio, al que tuvo acceso la radio local Santa María, podría producir un vuelco completo en uno de los casos más impactantes de los últimos años.

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Las grabaciones de las llamadas telefónicas dan cuenta de una supuesta conversación entre Nabila y una familiar del imputado, donde se exculpa a Ortega y además se dejan entrever presiones de la fiscalía.

“Escúchame. Yo cuando estaba en Santiago, recordé algo pero él (Mauricio) no era ¿Me escuchay? (sic) Yo tuve que llegar a Coyhaique y mi mamá me dijo (es interrumpida por gritos de niños) Mi mamá me dijo que si yo no decía que era él (Mauricio) ella me echaba, imagínate. Es que el Mauro no fue”, se le oye decir a la víctima, que luego profundiza en el caso e incluso da una descripción del hombre que ella supuestamente recuerda como el atacante.

“Nunca lo había visto, él estaba al frente y cuando me vio cruzó para el frente. Era medio leso, joven, pero yo me acuerdo como era… Era un poquito más alto que yo, flaco, sé como andaba vestido, su pelo era como metalero y blanco, bien blanco, un cabro de unos 35 años. Yo recuerdo eso desde cuando desperté allá en el hospital, yo recordaba a ese cabro y lo dije, le dije al fiscal qué es lo que me había pasado pero él piensa que yo lo inventé o lo soñé, como me habían pegado tanto, pero yo lo recuerdo tan real y no lo olvido, no es un sueño”, se escucha en la conversación, que supuestamente se hizo a escondidas, pues Nabila tendría prohibido hablar por teléfono.

“Yo lo quiero. Te juro que lo voy a sacar de esto…El otro día le dije al fiscal que había sido otra persona, pero el fiscal me dijo que no, que era él, que habían un montón de pruebas. Ahora voy a declarar en el juicio que no fue él, aunque mi mamá me eche”, se oye también en el llamado telefónico donde Rifo es llamada Nadia, tal como lo hacen sus cercanos, aunque por ahora ni la defensa de Ortega se atreve a asegurar que se trata efectivamente de la voz de la víctima.

Recordemos que Nabila sufrió una feroz golpiza que generó una serie de lesiones incluidos cortes, fracturas en el rostro y el cuerpo y la pérdida de sus globos oculares.