Un lactante de 4 meses murió este miércoles tras asfixiarse con un trozo de plumavit. Este lamentable hecho ocurrió en un edificio ubicado en la calle San Francisco, en Santiago Centro.
Según relató el comisario Julio Oviedo, de la Brigada de Homicidios de la PDI, al noticiero de Chilevisión, la familia del lactante había comprado una impresora y tras desenvolverla quedó expuesto el plumavit que la cubría.
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Aparentemente en un descuido, el bebé se llevó un trozo a la boca, y tras ver que algo extraño le pasaba, su hermanita de 2 años dio aviso.
La madre, desesperada, intentó auxiliarlo, y en esta maniobra le dio a beber agua. Grave error, pues esto solo hizo que el plumavit se expandiera y bloqueara aún más su vía respiratoria.
Al ver que no conseguía nada, la mujer bajó al bebé hasta el primer piso del edificio para pedir ayuda, pero ya era tarde.
Según explica Gonzalo Martínez, de la Cruz Roja, lo que se debe hacer en este caso es tomar al bebé de las partes duras, girarlo, y comenzar a golpear su espalda. Esto se hace 5 veces. Posteriormente se da vuelta, se comprime el pecho 5 veces más. Luego se revisa la cavidad bucal y revisa si el bebé puede respirar.
Cabe destacar que la asfixia en bebés menores a 3 años es la tercera causa de muerte en Chile, por eso es imprescindible que los padres sepan actuar si esto le ocurre a sus hijos.
