La famosa cantante estadounidense Selena Gomez se fue de viaje a México con un grupo de amigos para disfrutar unas merecidas vacaciones. La ex chica Disney llegó hasta las playas de Jalisco donde lució su curvilínea figura en un diminuto y ceñido bikini rosa.
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Como detalla el portal Telemundo, la joven de 22 años se hospedó en Casa Aramara, lugar desde donde compartió varias imágenes y también fue capturada por el lente de los paparazzis. Pero tal parece que el apretado y pequeño traje de baño le jugó una mala pasada, ya que varios malvados tuiteros la criticaron porque marcaba sus curvas.
La mayoría de sus seguidores acusó que había aumentado de peso, si bien su figura sigue siendo la de una mujer normal. Gomez rápidamente reaccionó y cambió las fotos del bikini rosado en Instagram, por otras de un traje de baño completo y de color negro.
“Selena Gomez fue a la playa y se olvido la cintura en su casa”, escribió una malintencionada tuitera. Otros la calificaron de “ballena” o “garrafa”. Pero otros fanáticos saltaron en su defensa “igual de hermosa que siempre”, “bellísima”, “ella no está gorda, odiosos”, escribieron en su apoyo.
