Se trata de una pequeña comunidad donde vive apenas un centenar de personas pero rodeados de miles de gatos, los que son considerados como elementos de buena fortuna.
Tashirojima es una isla perteneciente a la prefectura de Miyagi, Japón, ubicada en pleno océano pacífico. Comocida como “La isla de los gatos“, la localidad es destino obligado para los turistas que visitan el continente asiático y se considera amantes de los felinos.
Según cuenta la web del canal de televisión Animal Planet, los mininos han habitado la isla desde hace siglos, por lo que nadie ha dado con una cifra oficial respecto a su cantidad.
En relación a la población humana, sólo viven 100 personas, de las cuales la mitad supera los 65 años de edad.
El artículo asegura que los gatos se introdujeron en el lugar con el objetivo de controlar una incipiente plaga de ratones que estaba acabando con las granjas de gusanos de seda de la localidad. Una vez que la población emigró, fueron los gatos los que se apoderaron del lugar.
Cabe señalar, que los perros están prácticamente prohibidos, incluso los que pertenecen a turistas.
A partir de 1603 la actividad pesquera atrajo a pescadores de otras localidades que pasaban la noche esperando conseguir algo a través de la pesca en red. En ese momento, los gatos se acercaban a sus improvisados campamentos a pedirles comida.
Con el tiempo, estos mismos pobladores comenzaron a asociar estos comportamientos con predicciones sobre “patrones de la pesca” y el clima, comenta el sitio. Además, existe una leyenda que cuenta que luego de la muerte de un gato por una roca, los hombres crearon un santuario que hasta el día de hoy existe entre los dos pueblos que conforman la isla: Oodomari y Nitoda.
En la actualidad la isla se ha convertido en una popular atracción turística que sobrevive gracias a ello y a la pesca.
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