La clasificación Global Age Watch 2014 que elabora cada año la organización británica de ayuda a la vejez HelpAge International, toma en cuenta varios factores para determinar cuál es el mejor y peor país para vivir.

Un listado de 96 países son los que publicó la entidad este martes en Londres, donde Noruega destacó como la mejor nación para la tercera edad. Venezuela, en tanto, se ubica como uno de los peores países de Latinoamérica en el puesto 76º.

Seguridad de los ingresos, salud (esperanza de vida y bienestar psicológico), capacidades (posibilidad de trabajar o educarse), y entorno (seguridad, libertad cívica, relaciones sociales), son las variables que influyeron para elaborar el ranking.

Así, Chile se posiciona en el lugar 22 y se consolida como el mejor país para vivir de América Latina, seguido por Uruguay (23), Panamá (24), Costa Rica (26), México (30), Argentina (31), Ecuador (33), Perú (42), Bolivia (51), Colombia (52), Nicaragua (54), El Salvador (57), Brasil (58), República Dominicana (62), Guatemala (63), Paraguay (66) y Honduras (75).

Los “top 5” del listado lo encabezan las naciones de Noruega, Suecia, Suiza, Canadá y Alemania.

En el caso de Venezuela, su posición se explica por la inseguridad y por contar con la tasa más alta de pobreza en la tercera edad de los países latinoamericanos evaluados, pese a que sus pensiones están en la media.

Pese a que Brasil es la mayor economía latinoamericana, su ubicación se debe a la insatisfacción de las personas mayores con la seguridad y el transporte público.

Las personas mayores de 60 años son el 12% de la población mundial, unos 868 millones. Se estima que en 2050 serán el 21%, casi tantos como los menores de 15 años (unos 2.000 millones).

Realidad nacional

El documento señala que la expectativa de vida para una persona de 60 años llega a los 84, en tanto la esperanza de “años saludables” a partir de la misma edad, llega a los 18 años.

También indican que en la actualidad Chile tiene 2,6 millones de habitantes con más de seis décadas, es decir, un 14,6% de la población total, estimando que para el 2030 el porcentaje ascienda a 23,5.

Curiosamente el éxito en este ranking se debe principalmente a la salud “situándose por encima del promedio regional en indicadores de esperanza de vida y cerca del promedio en el bienestar psicológico”, señalan.

Sin embargo, “se ubica en el último lugar en el dominio de entorno propicio (49), está debajo de los valores promedios regionales para dos de los cuatro dominios: la conexión social (79%) y la libertad cívica (74%)”, consigna el informe.