El ex púgil, a pesar de haber tenido una destacada carrera en la categoría mosca, jamás pudo conseguir un título mundial, sin embargo, con el ego sobre las nubes señaló que él es más importante que otros tremendos deportistas de impecable trayectoria.

Marcelo Ríos fue número uno del tenis mundial; Iván Zamorano y Marcelo Salas tuvieron un dilatado recorrido en Europa, coronándose campeón en diversos torneos y rompiendo cientos de redes en sus clubes y en “La Roja” de todos. Nadie podría reprocharlos por sus méritos.

Sin embargo Martín Vargas, uno de los mejores boxeadores que ha tenido el país, nunca pudo lucir un cinturón de campeón mundial, a pesar de que estuvo cerca, muy cerca. Quizá, hablando desde la herida, el peleador no tiene pelos en la lengua para sentenciar que él fue mejor y más reconocido que los tres deportistas nombrados.

“Soy más grande que Zamorano, que Salas y que el “Chino” Ríos (…) ¿El “Chino” Ríos trajo a las personas a ver deporte cuando nadie quería salir de su casa? ¡No pueh! A mí me utilizaron, sin darme cuenta. Si yo tenía que ir a Chuchunco allá partía yo”, declaró Vargas al diario popular La Cuarta, recordando que el apogeo de su carrera tuvo lugar durante la dictadura de Pinochet.

Su categoría de “ídolo máximo” se acrecienta con el enorme reconocimiento y cariño por parte de la gente en todo momento. “En la calle te volvís loco conmigo. Saben quién soy, lo que hice. No hay otro deportista tan grande como yo en este país ¿O sí?”.

Actualmente, Martín se dedica a entrenar a aficionados que optan por el boxeo como una forma de liberar tensión y de mantenerse en forma.